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El trabajo infantil: diferencias campo - ciudad

Los niños trabajadores: diferencias campo - ciudad

La situación de los niños trabajadores se diferencia fácilmente entre campo y ciudad, aunque no se pueda contar con suficientes datos procediendo del campo. Los niños trabajando en las minas forman una categoría aparte.

La situación de los niños trabajadores en el área rural

No se puede generalizar el mundo del campo en Bolivia, porque la situación es lejos de ser homogénea, ni ecológicamente ni culturalmente, ni al nivel de tradiciones agrícolas. Se puede dividir el territorio boliviano en 4 regiones. La zona del Altiplano y ciertos valles donde predominan las pequeñas propiedades privadas y la tradición del trabajo agrícola familial. Las tierras bajas y fértiles del Oriente donde domina la producción industrial o semi industrial, (caña de azúcar, algodón, soya, tabaco,.). Luego una zona constituida del Beni y una parte de Santa Cruz dedicada al ganado vacunado. En medio de estos sectores, las zonas de colonización que reciben las poblaciones del Altiplano en tierras bajas (Potosí y Chuquisaca) que tienen características repartidas entre las dos tendencias, según afinidades de la población con la una o la otra.

Altiplano y valles

En las zonas andinas el trabajo de los niños está integrado en las relaciones familiares. Estas tradiciones siguen siendo las mismas que en el siglo XVII. La familia es a la vez unidad de consumo y de producción. La participación de cada miembro de la familia está requerida y fundamental en el proceso de producción. Por esto, el trabajo de los niños se integra totalmente en la supervivencia de la familia, y durante las épocas de sequía, el padre así como los hijos varones mayores migran a la ciudad para generar ingresos complementares, lo que ocasiona una sobrecarga de trabajo para la madre y los menores. En estos lugares el trabajo sobretodo por su aporte educativo es un valor positivo, que permite la supervivencia y la reproducción de todo el núcleo familial.

Los niños del Altiplano intervienen en las actividades productivas como en las reproductivas, participando directamente a la economía de la familia. La repartición de las tareas se define según la edad y el género de cada miembro de la familia, lo ideal siendo de desarrollar el papel de la mujer y de los niños para permitir al padre y a los hijos mayores de buscar afuera de la unidad familial otras actividades económicas.

Tradicionalmente los trabajos pesados (conducir el atelaje, arar, .) los efectúan los hijos varones; los trabajos livianos (selección de los granos, preparación de la comida para los animales, selección de los productos agrícolas) los efectúan las mujeres y los niños. La alimentación de los animales casi siempre es trabajo de las chicas, después de la madre, luego de los hijos varones, conducir el ganado es trabajo indiferentemente de las hijas o de los hijos, los animales de tiro siempre están a cargo de los padres. Esta repartición es « ideal » y la situación económica a veces obliga los padres a migrar, lo que perjudica a la división del trabajo y aumenta automáticamente la carga de trabajos de los que se quedan.

Los hijos varones se dedican a trabajos productivos y escolares, las hijas se dedican a trabajos productivos, reproductivos y escolares pero esto si tienen la suerte de ir a la escuela.

El calendario agrícola campesino sigue las épocas de siembra (de septiembre a noviembre) y por la sequía de los meses de abril y mayo. De febrero a abril se dedica a preparar los suelos, así como a los trabajos culturales, y de julio a septiembre se realizan los trabajos no agrícolas.

En los valles, los trabajos productivos de las madres y de las hijas son menos que en el Altiplano, pero las tareas reproductivas son iguales. El trabajo se reparte igualmente entre varones y mujeres.

Los niños trabajadores en el Oriente industrial y semi industrial

En estas regiones, la participación de las madres y niños es inferior a la de otras zonas. Sin embargo las actividades reproductivas son totalmente bajo su responsabilidad. En estos grandes espacios extendidos, se necesita frecuentemente mano de obra extra familial, entonces cuando trabajan los niños, es a partir de los 10 años para los chicos, y a los 14 ya trabajan como un adulto. Las chicas intervienen mucho menos en los trabajos productivos. Algunos niños trabajan también en grandes haciendas o para grupos agroindustriales.

La situación de los niños trabajadores en el área urbana

Los contextos urbanos son variados en Bolivia. La Paz por ejemplo, y El Alto, su satélite de pobreza, recibe la población emigrante de provincias mineras, del campo o de otras ciudades. El problema de esta ciudad (que se volvió la tercera ciudad del país) es que los servicios básicos (agua, electricidad, etc.) no se desarrollaron al ritmo del crecimiento de su población, que fue aumentando rápido debido a una emigración masiva. El estado sanitario de la ciudad es preocupante. Sobretodo en los nuevos barrios que no disponen de ninguna infraestructura. El Alto presenta la taza más alta de consumo de drogas, de pandillas de delincuentes. Un dato interesante es que la gran mayoría de los niños trabajadores de La Paz viene de El Alto.

Cochabamba es la cuarta ciudad del país, es una ciudad comerciante y centrada en la oferta de servicios. Por otra parte es la puerta de entrada al Chapare, región productora de la hoja de coca.

Santa Cruz, motor económico y motor de desarrollo en Bolivia. Estos últimos años fue el centro de una emigración masiva, procediendo sobretodo del Altiplano.

En resumen, podemos decir que la presencia de niños trabajadores es más fuerte en las ciudades del eje La Paz - Cochabamba - Santa Cruz, donde empiezan a trabajar más temprano que en el resto del país (desde los cinco años en algunos casos).

El sector informal crece mucho consecuentemente a la situación económica del país, y sigue el sector que más utiliza a los niños trabajadores, tanto en el medio familial que de forma independiente. En algunos de los casos, los niños no trabajan todo el año sino en épocas específicas como por ejemplo en vacaciones escolares, cuando aumenta de manera significativa el número de niños trabajadores.

Dentro de las actividades principales del sector urbano, distinguimos:

• El comercio
  • Los niños venden de forma ambulante una gran variedad de productos (cigarros, caramelos, helados, y todo tipo de productos fácilmente transportables), caminando en las calles, en los transportes públicos, etc... Trabajan de día y/o de noche en la calles, en las estaciones, en las terminales de buses, en los comedores populares del centro de la ciudad. Muchos son varones pero las chicas son cada vez más numerosas. La venta en puestitos fijos es más el trabajo de las niñas. La mayoría trabaja en el círculo familial. Ellas empiezan muy temprano en la mañanita y terminan a menudo después del anochecer.

• Los trabajos y servicios en la calle
  • Lustradores de zapatos
    La inversión inicial es poca, de más o menos 6 US$. Trabajan de manera ambulante. Sin embargo existe una relativa repartición territorial. El tiempo de trabajo es de 5 horas para los que siguen yendo a la escuela, hasta puede ser de 12 horas para los niños que han abandonado el sistema escolar. Era exclusivamente una actividad masculina hasta hace poco tiempo, pero se ven más chicas cada día, sobretodo en La Paz. El número de niños trabajadores aumenta en épocas de vacaciones escolares, lo que aumenta también la competencia.
• Cargadores
  Trabajan principalmente en los mercados y estaciones. Exclusivamente son chicos, que empiezan generalmente a los 10 años. Este trabajo no tiene tarifa específica, los ingresos son inestables, dependiendo de los días de mercado.
• Vendedores de periódicos
  Trabajadores de ambos géneros se encuentran en esta actividad, realizada gratis a veces por niños que tienen que ayudar a sus padres, cuando no está remunerada al porcentaje de ventas por niños que trabajan por la cuenta de adultos. Puede ser de manera ambulante o en puestitos fijos. Las ventas empiezan temprano en la mañana, y duran hasta mediodía más o menos.
• Basureros y « hurgadores » de basureros
  Esta actividad muy a menudo no se paga, porque se realiza en el marco familial, ayudando a la madre que está a cargo del asunto. Empiezan al amanecer, cuando no hay nadie en las calles, para terminar antes de que la ciudad se despierte del todo. Hay niños que hurgan a los basureros por recoger papeles, plásticos, botellas, que después volverán a vender.
• Niños del cementerio
  Esta actividad de preparación y mantenimiento de las tumbas, de los arreglos florales, en los cementerios está a cargo de niños de ambos sexos, el sueldo se negocia caso por caso.
• Cuidadores de coches
  Ambos sexos trabajan, generalmente por grupos de dos o más, guardan las movilidades de día como de noche, los precios se negocian con cada cliente.
• Lavadores de coches
  En las zonas de parqueo, niños proponen de lavar el coche. Habitualmente tienen unos 10 años, porque esto pide una cierta especialización así como una altura adecuada.
• Lavadores de parabrisas
  En las principales avenidas, cada semáforo tiene sus lavadores de parabrisas, que se echan a trabajar cuando se pone rojo. Empiezan a trabajar a partir de los 6 años.
• Vendedores de leña
  Venden leña para prender cocineras y hornos en las zonas donde no hay gas.

• Los servicios y trabajos fuera de las calles
  • En los hoteles y restaurantes, (lavan los platos, ayudan al cocinero.)
    Los horarios son fijos y sobrepasan a menudo las 10 horas de trabajo, domingos incluidos. Se señalan casos de abuso sexual.
• En los transportes
  Avisan gritando de las paradas de cada línea de microbuses, este trabajo incluye la ayuda a cargar los bultos de los pasajeros, que son a veces pesadísimos, el acojo y ubicación de los pasajeros, la limpieza de la movilidad. Los horarios son los más pesados. Frecuentemente más de 10 horas diarias, con sueldos proporcionales a la ganancia del día. Es un trabajo casi únicamente masculino.
• Empleados de casa
  Es uno de los sectores más grandes, sobretodo para las chicas, viniendo del campo. Los sueldos dependen de la instrucción y del nivel de lengua española de la niña. El trabajo va de lunes a sábado, con horarios superiores a 10 horas al día. Las tareas son principalmente la limpieza de la casa, lavar la ropa, encargarse de la cocina. Este sector es por naturaleza mal protegido, tanto al nivel de los sueldos que de los horarios, sin hablar de los derechos (a la educación, al descanso, etc.), de la protección física (sufren muchos abusos, maltratos), ni del seguro social.

• El sector semi - industrial
  • Las manufacturas son generalmente familiares, o de semi empresa. Comprenden talleres de metalurgia, de carpintería, de panadería, de mecánica, de costura tipo artesanal, con o sin capacitación real. Muchos niños trabajan allí bajo la apelación de « aprendices ».
  • En las ciudades del eje (La Paz, Cochabamba, Santa Cruz) talleres de textiles producen ropa para cuales los niños cobran por pieza, al final del día. En muchos casos los horarios pasan las 10 horas diarias, los aprendices teniendo menos de 10 años.
  • En los talleres de mecánica y otros trabajos manuales, los niños trabajan en condición de aprendiz. Los horarios y los sueldos son fijos.
  • El sector de la construcción es sinónimo a menudo de riesgos elevados, debido a la falta de normas de seguridad en las obras. Los niños, exclusivamente varones, son obreros, encargados de preparar el trabajo (hormigón, yeso, llevar los materiales). Empiezan a trabajar a los 10 años, sobre recomendación familial habitualmente. Los horarios pasan las 10 horas diarias, los trabajos son temporales, dependiendo de cuantos contratos tiene el jefe de obras. La mayoría de los obreros entran en la profesión de esta manera.